Si algo preocupa, se analiza y se potencia siempre en Alimentaria es la innovación en el sector del gran consumo. Kantar y Loop ya señalaron en la primera jornada de la feria las principales claves para que cada lanzamiento pueda triunfar en el mercado. Ahora ha sido Aecoc, en el segundo día del salón, la que aporta cómo es la visión del comprador sobre cada novedad que llega a las tiendas.

Y lo hace con una conclusión importante: más de un 46% de los consumidores incorpora productos nuevos a su cesta de la compra tras probarlos. De ellos, ocho de cada diez afirma que el producto cumple con el beneficio que esperaban. Datos positivos más aún teniendo en cuenta que, según Kantar, en 2015 el número de innovaciones creció el 9% tras cuatro años de caídas, si bien no consiguieron alcanzar la facturación deseada.

Xavier Cros, responsable de Aecoc ShopperView, ha presentado en Alimentaria el último estudio señalando que "la innovación se compra menos que antes". Primero, por culpa de la crisis: el 29,4% de los consumidores declara que compra menos productos nuevos ahora. Segundo, porque "cada vez es más difícil dar con algo innovador" hasta el punto de que la mayoría de los compradores entiende que casi todas sus necesidades están cubiertas y no esperan muchas novedades en el mercado.

El 61% de los consumidores encuestados entiende que la innovación está en el producto, ya sea porque es nuevo (37%) o porque aporta una mejora a su anterior versión (24%). Además, el 52% asegura que son las marcas de fabricante las que tienen más capacidad para innovar y por ello esperan más de ellas. Las MDD también son bien vistas y el 43,5% asegura que también son innovadoras.

Ante ello, el 41% afirma que se fija en las novedades que aparecen y las suele comprar, mientras que un 33% lo hace solo por recomendación. Solo un 6% señala que no prueba las innovaciones y compra solo lo que conoce. Importante señalar que, según el barómetro del Shopper que elabora Aecoc, en el primer trimestre de este 2016 el 67% de los consumidores afirma haber comprado un producto nuevo en su última compra y que no había adquirido nunca antes.

Cros ha recordado que con la innovación existe el peligro de la saturación y muchos compradores ven el constante lanzamiento de productos nuevos desde una misma categoría como algo negativo: hay pérdida de credibilidad, pues cuestionan la capacidad de los productos para hacer lo que prometen y la capacidad de las propias marcas para lanzar tanta innovación.

¿QUÉ SE BUSCA EN LA INNOVACIÓN?

El 47% de los consumidores indica que cuando ha comprado una novedad, además de un producto nuevo ha encontrado en él una verdadera innovación. Un 35% de los encuestados afirma buscar un mejor sabor, mientras que el mismo porcentaje destaca el valor de conveniencia (el 15% destaca que sean productos más efectivo y el 11% valora que los artículos les facilite la vida). Sigue aumentado el porcentaje de consumidores que buscan productos más saludables (10%).

Tras la experiencia de compra y de consumo de la innovación, como se ha señalado el 46% de los consumidores incorpora el producto nuevo a su cesta habitual de la compra. Cuando fracasa es porque el beneficio no justifica su precio, porque no se percibe sano, porque no aporta un beneficio diferencial o porque no aporta más que la versión anterior.