Las primeras reacciones a la venta de Nueva Pescanova a la compañía canadiense Cooke Inc. no se han hecho esperar. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha declarado hoy en rueda de prensa:

"En la Xunta de Galicia necesitamos y exigimos que se mantenga la viabilidad de la empresa, como se ha mantenido hasta ahora, y por supuesto los muchísimos puestos de trabajo, tanto en Galicia como en toda esa flota que está pescando por los mares de todo el mundo".

Rueda añadió igualmente que el principio de entendimiento anunciado por Abanca, titular de un 97,76% del capital de la pesquera, debe implicar que su "domicilio social y el domicilio fiscal se siga manteniendo en Galicia, por lo tanto eso es lo que pediremos en esta operación".

"Creo que el nuevo propietario tiene mucha experiencia en materia pesquera, y creo que eso es bueno también, y en principio es una decisión entre entidades privadas, y lo que le corresponde a la Xunta de Galicia es velar para que la riqueza que Nueva Pescanova está suponiendo en Galicia se mantenga, y, si puede ser, se acreciente", subrayó el presidente gallego.

Por su lado, el sindicato CIG evaluó de manera negativa la venta de Nueva Pescanova a la multinacional canadiense, ya que considera que no hay una "garantía de mantenimiento" de los actuales puestos de trabajo.

Como adelantaba ayer Food Retail & Service, Abanca ha elegido a la canadiense Cooke Inc. en detrimento de sus dos alternativas, la estadounidense Red Chambers y la firma gallega Iberconsa,  para la venta de Nueva Pescanova, que mantendrá su marca y sede en Vigo.

Un comunicado de la entidad bancaria remitido a la prensa este jueves indica que hubo entendimiento con Cooke Inc. para negociar en exclusividad la compraventa del 80 por ciento de su participación en Nueva Pescanova.

La transacción defiende una valoración futura de Nueva Pescanova de 800 millones de euros, lo que multiplica por diez el ebitda de 2021, que fue de 80 millones.

Sin embargo, la entidad bancaria explica que la sede de Nueva Pescanova continuará en Vigo y garantiza que continuará apoyando a la compañía en el desarrollo de su proyecto empresarial con su presencia en el accionariado y, a la par, como aliado bancario de la multinacional.

Esta compañía familiar canadiense con sede en New Brunswick cuenta con divisiones de acuicultura, proteína marina, pesca salvaje y nutrición, opera en doce países y su plantilla es de casi 13.000 empleados, por los algo más de 9.000 que tiene la pesquera gallega.