Alimerka planea un ERE para 343 de sus empleados en Castilla y León, el segundo mercado en importancia de la cadena asturiana. Esta decisión se debe a las pérdidas, de alrededor de cinco millones de euros, que prevé para este ejercicio, informa ABC.

No obstante, Alimerka ha planteado una alternativa al despido de esos casi 350 empleados, consistente en un ERE para 65 trabajadores, el cierre de tres tiendas y una rebaja salarial para toda la plantilla de la comunidad castellanoleonesa, que asciende a unas 1.100 personas, informa El Comercio.

Alimerka ha confirmado a GranConsumo.tv la existencia de conversaciones con los agentes sociales, aunque ha desmentido que, de momento, planee despedir a trabajadores. "El Grupo Alimerka viene manteniendo conversaciones periódicas con las distintas fuerzas sociales de Castilla y León de cara a analizar la sensible disminución del consumo en la Comunidad y como podría, en su caso, afectar a las actividades del Grupo en esta área geográfica, sin que de las mismas se haya obtenido ninguna conclusión determinante hasta la fecha y menos aún propuesta alguna al efecto. Carece pues de fundamento toda afirmación en el sentido de ajustes en el empleo a través de despidos, opción esta que no ha sido contemplada en ningún momento a día de hoy".

A pesar de estas informaciones, lo cierto es que Alimerka sigue apostando por Castilla y León. Así lo demuestra la previsión de una apertura de un centro en Burgos, el tercero en la provincia, para el mes de diciembre, con 1,5 millones de euros de inversión y 30 puestos de trabajo creados.